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En la provincia de Chanchamayo, en la zona central de Perú, llamada la capital cafetalera peruana, se produce el café orgánico que está considerado el más caro del mundo, cuyo precio alcanza los 1.400 dólares por kilo.

Se trata del café Misha, nombre que se deriva del animal amazónico mishascho (coatí), cuyos granos son tragados por el mamífero carnívoro, que al no poder digerirlos, los expulsa enteros.

El excremento del animal se escoge entonces, lava, seca y tuesta, luego de que en el proceso digestivo, los ácidos del estómago filtraron el núcleo del grano.

Este proceso hace que el Misha sea menos amargo y tenga un olor afrutado, por ende delicioso al paladar.

"Es un producto que se procesa de manera natural en el aparato digestivo del animal", explicó a Xinhua el gerente de la compañía Chanchamayo Hifhland Coffe, José Durand.

"Y este café, por su pequeña cantidad de proceso, es carísimo", comentó el caficultor.

Durand precisó que cuentan con 106 animales mishasho domesticados desde pequeños que son soltados al campo y que retornan para ser alimentados con café tres veces al día.

Al año se procesan alrededor de 450 kilos del Misha, por lo que ese grano tiene una alta cotización.

En Chanchamayo, región de Junín, a unos 306 kilómetros al oriente de Lima, los cultivos cafetaleros se realizan en la vertiente oriental de la cordillera conocida como Selva Alta, a unos 1.800 metros de altitud, y cuentan con unas 60.000 hectáreas dedicadas al grano aromático.

A su vez, el director comercial de la empresa Dago, César Marín, detalló que "toda la producción es biodinámica, que es un manejo muy orgánico. Tiene que ver con el calendario astronómico lunar".

"Y todo el café es tipo arábica y tenemos catimor, caturra, Costa Rica 95 y típica apache. Como en todo el Perú, todos tenemos diferentes tipos de café", anotó Marín.

Explicó que la biodinámica es un tipo de agricultura que va más allá de lo orgánico, un sello que indica el no uso de químicos y abono orgánico, así como plantas medicinales de diferentes especies, que representa lo natural.

El café es uno de los primeros productos agrícolas de exportación de Perú, que sumó 800 millones de dólares en 2017 y se espera supere los 1.000 millones este año, según datos del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri).

De acuerdo con proyecciones de los productores cafetaleros, el país sudamericano tiene como meta alcanzar los 2.000 millones de dólares en 2021.

La mejor cifra de despachos a los mercados internacionales se registró en 2011, año en que se alcanzó el récord de 1.650 millones de dólares.

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